El Lanzador de aplicaciones detecta una aplicación dañada al lanzarla. Si el archivo de la aplicación al que llama no se puede lanzar (es decir, la llamada a CreateProcess del Lanzador de aplicaciones devuelve un valor falso), el Lanzador de aplicaciones asume que la aplicación está dañada y que debe verificarse. Cuando esto sucede, el Lanzador de aplicaciones informa al usuario de que existe un problema y le permite elegir entre verificar o no la aplicación.